Hay una carta para ti
Todo lo del Cabogago (típico nombre imposible de pronunciar cuando estás borracho) es de otro tiempo. Ya no nos vamos a plantear la forma de ganarse la vida que eligió este joven sin que nadie le obligase a ello (presumo), pero sí que ese estamento (casta?) al que pertenece tenga sus propias leyes y se comporte como una sociedad dentro de la sociedad a la que dice defender (de quién?) y por eso el tipo estuvo a punto de pasar por el talego por ejercer el supuesto derecho a la libertad de expresión y contar en una tele lo mismo que contó al juez...





